Debemos convertirnos en impiadosos censores de nosotros mismos. No sé bien que significa, pero me gusta como suena.

A veces me pregunto si vos pensás en mí como yo pienso en vos. Te extraño tanto. No puedo creer que ya no estemos juntos. Fue tan importante lo nuestro para mi. Fue tan lindo y malo a la vez. Esa me parece que es la definición correcta para lo nuestro.  "Bad and Beautiful". Hace tanto que no hablamos y hay tantas cosas que te quiero contar. Anoche, por ejemplo, soñé con vos. Soñé que éramos invisibles y entrábamos a la rosticería de al lado y nos comíamos todo. También pasó un temporal, anoche, por la ciudad. ¿Te enteraste? El viento fue impresionante, los árboles parecían que se iban a salir de raíz. En la tele dijeron que fue casi un tornado, casí, y mostraban imágenes de árboles caídos y autos dados vueltas. Como siempre, la gente más pobre es la que más sufre. A una villa miseria, la desparramó. Mi mamá, dice, que en pleno temporal vio pasar a un wachiturro volando por la ventana y que lo saludó “que onda”. Exagerada. Cambiando de tema, ahora estoy con alguien. No sé si sabías, hace como unos meses que estoy saliendo. Pero no la amo. A veces me preguntó si se puede estar con alguien y seguir pensando en otra persona. Vos que decís? Yo creo que si. Igual olvidar o enamorarse es cuestión de voluntad, es una decisión personal, no importa mucho la otra persona. Uno se programa y listo, va para adelante a pesar de todo. En la película de Chayanne “baila conmigo” uno de los personajes, antes de subirse a la maquina del tiempo, le dice a Chayanne (que acaba de perder las piernas en la lambada de la muerte) “la re limaste guacho, ahora tenés que aprender de tus limitaciones, transformar tus defectos en virtudes y salir para adelante”. Esa frase me pareció siempre genial y aunque me cuesta, siempre trato de hacerlo. El lunes fui con ella, mi nueva chica Indie, a un recital. Yo no quería ir, pero le debía una de una vez que me acompañó a la cancha y le tiraron un choripan en la cabeza cuando metió un gol racing. Fue lo más snob que vi en mi vida. El recital era un tipito levitando y tocando el cajón peruano. Bajón. Me aburrí mucho. Seis horas estuvo, flotando a un metro y medio del escenario, tocando la caja esa de madera. Porque para mi siempre fue eso, una caja de madera. Hizo covers de Metalica y un remix de "LAST TRAIN TO LONDON" de Electric Light Orchestra que duro una hora. Para mi sonaba todo igual. A la salida vi un ovni. En fin, igual mejor esta chica snob que la otra hippie con la que estaba antes. La hippie me volvía loco, todo el día hablando de la energía, siempre decía que éramos solo un envase de energía. Que no tenía que preocuparme, que todo era una cuestión de ego y que la realidad es ilusión. Que la realidad es ilusión ¿podes creer? Se quedó en mi casa dos meses. Le tenía que pagar todo porque no tenía plata. Un día me dejó. Dijo que necesitaba hacer un viaje para volver a la independencia del universo. Le dije que no quería que se vaya, que se estaba cagando en todo lo nuestro. Me dijo que las personas son libres y que el amor trasciende. Que si estábamos destinados a estar juntos, el universo iba conspirar para juntarnos, en esta o en otra vida. Y que yo debía practicar el desapego. ¿Yo practicar el desapego? ¿Podés creer? Le di casa, comida, le compre un montón de cosas y yo tenía que practicar el desapego. Aparte le había conseguido un laburo re lindo a esta mugrienta, tres horas de secretaria para una odontóloga amiga de mi mamá. Pero la minita no quiso ir más, dijo que había mucha energía negativa en el consultorio y que eso le estaba corriendo de lugar los chacras o los puntos de no sé qué eje de energía universal. Odio a los hippies. Odio su ropa de feria americana y sus frases de autoayuda. Sus artesanías y sus malabares. La mugre, sobre todo la mugre. Está no se depilaba abajo, tenía como un mono titi entre las piernas. Aparte estos siempre se hacen los copados, quieren quedar bien con todos, para sacar interés propio. Se la pasan viajando porque están vacíos y usan el viaje como una evasión de la realidad. Mangueros, te piden todo. Te acordás cuando veníamos de la playa y vimos como atropellaban al hippie ese. Que flash. Volaron semillas, pulseritas de macramé, rastas y aritos para todos lados. A vos te cayó una trencita de mostacillas y macramé en el pelo y te quedó re linda. La usaste como un año. En fin, esto del cajón peruano me hizo pensar. No sé porque en mar del plata, donde el 98 por ciento de los hombres son músicos y el 97 por ciento de las minas groupies, no sale una banda buena. No hay propuestas. Son todas copias. Yo creo que son malos músicos y egocéntricos que lo único que quieren es ser mirados colgando una guitarrita. Bueno me voy, me están esperando. Tengo que ir a una fiesta llena de gente rara que se hace la rara. Igual me voy a fumar ochocientos porros para que se apague el cerebro y no sienta nada. Te dejó una canción, que siempre cuando la escucho me hace pensar en vos y en mi. Ojalé te guste y te sientas identificado.